Introducción

Cambiar una llanta pinchada en tu bicicleta puede ser intimidante para algunos, pero es una habilidad importante que todo ciclista debería tener. Si bien es posible que nunca haya tenido una llanta pinchada antes, es casi seguro que eventualmente la tendrás. Saber cómo cambiar una llanta pinchada en lugar de tener que llamar a alguien para que venga a arreglarla puede ahorrarte tiempo, dinero y estrés. En este artículo, te guiaré a través del proceso paso a paso para que puedas estar en tu camino en poco tiempo.

Paso 1: Reúne tus herramientas

Antes de comenzar, asegúrate de tener todas las herramientas necesarias a mano. Necesitarás:

• Una cámara de repuesto
• Un kit de parches de llanta
• Un par de palancas de neumáticos (también conocidas como desmontables de neumáticos)
• Una bomba de bicicleta (preferiblemente con un manómetro)
• Una llave inglesa (si tiene un sistema de frenos de disco)

Si bien algunas de estas herramientas pueden parecer un gasto innecesario, pueden ahorrarte tiempo y dinero a largo plazo.

Paso 2: Retira la llanta pinchada

Comienza por sacar la rueda de la bicicleta. Dependiendo de la bicicleta, deberás aflojar los frenos o cambiar a la posición correcta para poder deslizar la rueda fuera del cuadro. Luego, usa tus desmontables de neumáticos para quitar una de las secciones de la llanta. Inserta una palanca de neumático debajo del borde del neumático y levanta la sección sobre la llanta. Haz lo mismo con una segunda palanca en un punto cercano. Continúa de esta manera hasta que puedas sacar la sección del neumático fuera de la llanta.

Paso 3: Encuentra la causa de la pinchadura

Ahora que has retirado la llanta pinchada, examínala detenidamente para encontrar la causa del pinchazo. Puede ser una piedra, un alambre, un trozo afilado de vidrio o algo completamente diferente. Si no puedes encontrar la causa, infla la cámara y escucha un silbido. Eso te dará una idea de dónde está la fuga de aire.

Paso 4: Repara o reemplaza la cámara de aire

Si la causa de la pinchadura es una pequeña perforación, puedes usar un kit de parches de neumáticos para arreglar la cámara de aire. Si la perforación es demasiado grande o el neumático está muy desgastado, deberás reemplazar la cámara de aire por completo. Para reparar la cámara con un parche, desinfla la cámara por completo y limpia el área alrededor de la perforación con una toalla. Luego, aplica un poco de pegamento de vulcanización al parche y colócalo en la ubicación de la perforación. Presiona firmemente durante al menos 30 segundos para que el parche se adhiera adecuadamente. Si necesitas reemplazar toda la cámara de aire, retira la cámara de aire vieja de la carcasa del neumático y coloca la cámara nueva en su lugar. Asegúrate de que la cámara esté colocada correctamente y que no haya arrugas en el neumático.

Paso 5: Vuelve a montar el neumático

Ahora que la cámara de aire está reparada o reemplazada, es hora de volver a montar la llanta en la bicicleta. Comienza colocando la sección de la llanta que retiraste anteriormente de nuevo en su lugar. Usa tus dedos para asegurarte de que la cámara de aire no queda entre la llanta y el neumático. Luego, usa las palancas de neumáticos para volver a colocar la sección restante sobre la llanta. Asegúrate de que el neumático esté centrado en la llanta y de que la cámara de aire se encuentre correctamente en la carcasa del neumático.

Paso 6: Inflar el neumático

Ahora que el neumático está de nuevo en su lugar, es hora de inflarlo. Usa una bomba de bicicleta para inflar el neumático a la presión adecuada que se encuentra grabada en la pared lateral del neumático. Si tienes un manómetro en tu bomba, úsalo para asegurarte de que la presión es correcta. Si el sistema de frenos de tu bicicleta es de disco, asegúrate de volver a apretar las tuercas del rotor antes de inflar el neumático.

Paso 7: Vuelve a colocar la rueda

Finalmente, vuelve a colocar la rueda en el cuadro de la bicicleta. Asegúrate de que los frenos estén correctamente colocados y las tuercas o cierres rápidos estén apretados.

Conclusión

Ahora que sabes cómo cambiar una llanta pinchada en tu bicicleta, estarás preparado para cualquier situación de emergencia en la carretera. Recuerda siempre llevar una cámara de repuesto, un kit de parches de neumáticos, y unas palancas de neumáticos en caso de una llanta pinchada. Con un poco de práctica, ¡cambiar una llanta pinchada será una tarea fácil!